El patrimonio cultural se considera un recurso único y no renovable que posee un valor cultural, científico, espiritual, tradicional o religioso y suele estar protegido legalmente. Más específicamente, el patrimonio cultural incluye lo siguiente1 :
- Patrimonio tangible, objetos muebles e inmuebles (por ejemplo, propiedades, tumbas, sitios, estructuras o grupos de estructuras) que tienen valor arqueológico, paleontológico, histórico, cultural, artístico o religioso.
- Características naturales u objetos que encarnan valores culturales, como rocas, cuevas, ríos y cascadas sagrados
- Formas intangibles de cultura que encarnan valores culturales o forman parte de una tradición cultural viva, como conocimientos locales, innovaciones o prácticas de la comunidad (lo que también se denomina patrimonio vivo).
La gestión del patrimonio cultural es esencial para mantener buenas relaciones con las comunidades. Muestra respeto por las culturas y las tradiciones. Si este aspecto se descuida o se ignora, podría convertirse en una fuente de conflictos e impulsar la oposición al sitio. Más allá de sus obligaciones legales, Anglo American tiene el compromiso de seguir los estándares internacionales de buenas prácticas, incluso cuando sea posible que determinadas formas de patrimonio cultural tangible e intangible no cuenten con la protección de la legislación del país receptor.
El patrimonio cultural no es importante en todos los contextos. Cuando la evaluación preliminar (screening) y/u otras evaluaciones (por ejemplo, ) hayan determinado que no hay impactos en el patrimonio cultural, el sitio deberá obtener una carta de las autoridades nacionales y locales adecuadas (por ejemplo, Ministerio de Cultura, Patrimonio Cultural, Ambiente o Arqueología) confirmándolo. Tenga en cuenta que es posible que el patrimonio cultural aún se convierta en una cuestión, por ejemplo, como resultado de una expansión del sitio, a través del relacionamiento con las partes interesadas o mediante hallazgos fortuitos.
Los impactos en el patrimonio cultural pueden ser directos (perturbación física o daños a un recurso que alteren, positiva o negativamente, el valor científico o cultural de tal recurso) o indirectos (cambios en el ambiente físico del recurso que modifiquen su valor cultural, o actividades que restrinjan o limiten el acceso de las partes interesadas a tal recurso). Los impactos suelen resultar de la/el:
- Preparación del sitio: las actividades que implican el movimiento de tierras (es decir, eliminación de la vegetación, nivelación/aplanado y excavación) pueden dar como resultado daños o la eliminación/destrucción completa de recursos del patrimonio cultural.
- Adquisición de tierras: el patrimonio cultural ubicado en tierras que se comprarán/utilizarán o relacionado con éstas se verá inevitablemente afectado.
- Infraestructura: la construcción de carreteras puede restringir el acceso para los usuarios del patrimonio cultural o facilitar el acceso para las personas que no pertenecen a la comunidad (turistas, inmigrantes, mineros artesanales).
- Impactos ambientales: los impactos ambientales de un sitio pueden dañar o perjudicar el valor cultural de un recurso, lo que resulta más obvio cuando un objeto o lugar sagrado es una característica natural (por ejemplo, río, bosque).
- Reasentamiento: además de los impactos que resultan del acceso físico a la tierra, la reubicación de familias puede provocar una disrupción grave en las costumbres y tradiciones sociales (véase la sección 4F).
- Migración inducida por la operación (SIM) (véase la sección 4G): los inmigrantes atraídos por las oportunidades económicas percibidas que ofrece el sitio pueden afectar profundamente las costumbres y tradiciones sociales de las comunidades existentes, ya sea a través de la explotación de recursos naturales, la invasión de tierras o el debilitamiento de culturas, prácticas religiosas, idiomas e instituciones tradicionales. Los pueblos indígenas (véase la sección 4I) pueden ser especialmente vulnerables a los impactos en el patrimonio cultural provocados por la SIM.
- Desarrollo socioeconómico (SED) (véase la sección 4A): los programas de desarrollo que se centran en la comercialización del patrimonio tangible o intangible (por ejemplo, aumento en el turismo, comercialización de ropa tradicional, etc.) pueden proporcionar ingresos valiosos, pero también pueden socavar tradiciones y costumbres.
Planificación del ciclo de vida
Los impactos deben identificarse lo antes posible en el ciclo de vida para minimizar la disrupción y dar tiempo suficiente para una gestión adecuada de las medidas que se desarrollarán. Sin embargo, las cuestiones del patrimonio cultural pueden surgir en cualquier etapa. Es posible que algunos impactos sólo se vuelvan evidentes durante la construcción una vez que se realicen movimientos de tierra (por ejemplo, es posible que tumbas o recursos arqueológicos no identificados anteriormente se descubran durante el despeje del terreno). Del mismo modo, es posible que los impactos sólo surjan durante las operaciones (por ejemplo, grietas en una iglesia o en un lugar de culto provocadas por la voladura).