¿Qué es un conflicto?
Un conflicto se define como un desacuerdo fundamental entre dos o más partes, a raíz de intereses, valores o necesidades contrastantes. Un conflicto puede ser latente, no dar como resultado ninguna acción o manifestarse cuando toma la forma de una controversia explícita. La violencia es sólo una de las maneras en que el conflicto se manifiesta.
Un conflicto es una situación continua que no se ha resuelto y no puede resolverse a través de un acuerdo entre partes interesadas convencional, y/o ha dado como resultado expresiones abiertas de hostilidad, agresiones o interrupciones en el relacionamiento con partes interesadas externas. Las herramientas descritas en esta sección deben aplicarse a los casos en los que hay manifestaciones de conflictos, como se describe aquí, o cuando hay indicios de que existe un potencial para que estas manifestaciones se desarrollen.
Un conflicto puede tener causas constructivas o destructivas, así como resultados constructivos o destructivos. Un posible resultado de un conflicto es una controversia, pero el conflicto también puede conducir a una reconciliación, a la evasión de problemas o a concesiones. Una respuesta oportuna y constructiva a un conflicto puede dar lugar a resultados más positivos.
¿Cuál es la diferencia entre un conflicto y una controversia?
Un conflicto es un estado constante de desacuerdo entre dos o más partes. Una controversia es una expresión de un conflicto en un momento específico y puede manejarse a través de varias medidas, que van desde la prevención hasta la negociación, el arbitraje, la resolución judicial y el uso de la fuerza.
Respuestas de gestión de conflictos
Las potenciales respuestas a los conflictos varían mucho. Algunas respuestas pueden conciliar cualquier diferencia entre las partes, mientras que otras pueden agravar el nivel de conflicto. A continuación, se presentan respuestas típicas de gestión de conflictos:
- Control: esta respuesta se caracteriza por la fuerza y la agresión, y suele emplearse cuando el conflicto se considera como una competición con ganadores y perdedores. Puede conducir a una escalada en el conflicto, cuando el perdedor se resiente por el resultado, resulta lastimado o trata de contraatacar en otro momento.
- Evasión: este estilo se traduce en el hecho de que (una o varias de) las partes se abstienen física o emocionalmente del conflicto, para no hacer daño a los demás. Este estilo puede hacer que el conflicto quede sin resolver.
- Acomodación: con este enfoque, hay una preocupación significativa por el mantenimiento de las relaciones. Los desacuerdos se pasan por alto o se minimizan, y no se articulan las opiniones divergentes. Prevalece un mensaje de “paz a cualquier precio”, y no se resuelve el conflicto.
- Concesiones: aunque este enfoque se utiliza comúnmente, proporciona una respuesta a corto plazo en lugar de una solución a largo plazo, lo que puede hacer que las partes experimenten una falta de satisfacción y una sensación de pérdida. Hacer concesiones a un grupo de partes interesadas con respecto a una cuestión también puede implicar el riesgo de crear cuestiones ante otras partes interesadas, que podrían considerarlo una falta de equidad.
- Reconciliación: este enfoque con frecuencia se refiere a la resolución de disputas y a la gestión de conflictos realizadas por todas las partes sin el uso de un facilitador externo o mediador. Es cuando las partes en conflicto trabajan juntas para resolver los asuntos en controversia en base a una comprensión común de los hechos, las leyes y las normas, y buscan sentar las bases para la colaboración en el futuro.
- Solución de problemas: este es un proceso basado en el respeto mutuo y en el consentimiento, con el fin de encontrar soluciones que resulten beneficiosas para todas las partes. Aunque toma tiempo, es la mejor forma de encontrar soluciones justas, duraderas y que proporcionan ventajas significativas para las partes en conflicto.
Sensibilidad al conflicto
La sensibilidad al conflicto se refiere a las estructuras, la cultura y las capacidades que tiene una organización para comprender los conflictos en el contexto en que opera y cómo sus operaciones afectan o generan situaciones de conflicto, así como a su capacidad para responder con eficacia a los conflictos, de manera que se puedan mitigar las consecuencias negativas y mejorar las positivas.
El conflicto como un impacto para las partes interesadas y un riesgo para el negocio
El conflicto representa un riesgo para el negocio cuando causa una amenaza real a la reputación, la producción, las finanzas o la salud y seguridad de los trabajadores del sitio. Un sitio también puede introducir o exacerbar conflictos en un área a raíz de su presencia y/o de sus actividades, afectando de esta manera a las partes interesadas; esto puede manifestarse en un conflicto entre los diferentes grupos de una comunidad (conflicto dentro de la comunidad) o entre diferentes comunidades (conflicto entre comunidades). A su vez, esta situación puede presentar nuevos riesgos para el sitio.
Un conflicto entre partes interesadas externas que no ha sido causado ni exacerbado por el sitio (por ejemplo, cuando hay un conflicto entre diferentes grupos de partes interesadas con relación a la pobreza, la marginación social y política, la falta de justicia, la corrupción o el poder) puede plantear dificultades para la ejecución del trabajo cotidiano por parte del equipo de desempeño social. Por ejemplo, cuando las partes interesadas externas se niegan a trabajar juntas, o cuando las instituciones no funcionan a raíz de conflictos internos, esto puede afectar la capacidad del sitio para realizar sus actividades de relacionamiento con las partes interesadas, o para implementar medidas de mitigación y proyectos de desarrollo socioeconómico. Los conflictos entre las partes interesadas externas también pueden afectar sus percepciones y expectativas, lo cual puede dar como resultado quejas o incidentes que podrían tener impacto en el sitio (por ejemplo, ciertas partes interesadas podrían protestar si consideran que otra parte interesada ha tenido un mayor acceso a beneficios, o si un grupo recibe beneficios a los que otro grupo considera que no tiene derecho).
Cuando un conflicto es exacerbado o causado por el sitio, esto debe considerarse un impacto negativo en las partes interesadas externas. A continuación, se presentan ejemplos de los tipos de actividades del sitio que pueden causar o exacerbar conflictos con partes interesadas externas:
- Contratación y compras: las prácticas de empleo y de compras locales pueden crear expectativas en la comunidad local, y dar lugar a problemas de competencia y resentimiento entre diferentes grupos de la comunidad. Las prácticas de empleo también pueden causar desigualdades reales o percibidas en el acceso a los beneficios, lo que puede dar como resultado un aumento en las desigualdades y la discriminación
- Acceso a la tierra, desplazamiento y reasentamiento: El desplazamiento económico y/o físico puede provocar una disrupción en las estructuras comunitarias existentes, agudizar los desequilibrios de poder en las comunidades, causar tensiones entre comunidades reasentadas y comunidades receptoras, y dar lugar a un resentimiento entre personas reasentadas y personas no reasentadas. La necesidad de tierras del sitio reduce la disponibilidad de tierras para la comunidad y puede conducir a una especulación de tierras y a una mayor competencia sobre las tierras disponibles en la zona.
- Migración inducida por la operación: la migración inducida por la operación puede dar como resultado una competencia por beneficios, lo que incluye las oportunidades de empleo y de compras locales entre grupos “locales” y “no locales”. La llegada de inmigrantes puede provocar una disrupción en las comunidades locales, ejercer presión sobre los servicios/infraestructura locales y el medio ambiente, aumentar la competencia por la tierra y el acceso a los recursos naturales, y agravar los problemas sociales, como el riesgo de explotación y violencia sexual y de género (lo que incluye la prostitución).
- Relacionamiento con las partes interesadas: los enfoques deficientes de comunicación y relacionamiento con las partes interesadas externas, que incluyen las prácticas de relacionamiento no inclusivas, pueden dar lugar a frustraciones y hostilidad. Un relacionamiento deficiente también puede restringir la capacidad que tienen los sitios de comprender plenamente los riesgos e impactos, limitando su capacidad de prever y manejar los conflictos con eficacia.
- Protección: la participación de fuerzas militares o policiales en la gestión de la seguridad del sitio, así como las acciones de servicios de seguridad privada, pueden causar tensiones con las comunidades locales, pero también pueden tener un papel en la mitigación de los conflictos.
- Impactos medioambientales: los impactos adversos medioambientales y potenciales impactos de salud asociados, o su percepción, pueden generar resentimiento. Los impactos medioambientales también pueden cambiar el acceso a los recursos naturales entre diferentes comunidades o dentro de cada comunidad.
Los impactos adversos en las comunidades indicados anteriormente también pueden representar fuentes de riesgos para el negocio. Los siguientes riesgos para el negocio pueden ser aplicables a sitios que operan en un contexto de conflicto:
- Finanzas: mayores gastos operacionales a raíz de una mayor protección para la infraestructura del sitio, lo que incluye la instalación de equipos de protección y/o el aumento en el número de miembros del personal de seguridad, el aumento de los costos de seguro y las pérdidas materiales por la destrucción de propiedades o materiales del sitio.
- Producción: imposibilidad de lograr las metas de producción debido a la disrupción de las actividades planificadas o la producción.
- Seguridad: amenazas a la seguridad física y al bienestar de los empleados.
- Aspectos jurídicos: demandas judiciales contra los perpetradores de actos violentos.
- Reputación: daños a la reputación de Anglo American debido a la asociación con conflictos. Esta asociación puede dar como resultado un debilitamiento de la licencia para operar, el deterioro de la confianza y/o del consentimiento de las partes interesadas, y la incapacidad de atraer o mantener personal competente.
Planificación del ciclo de vida
El potencial para conflictos en el contexto de un sitio minero no siempre es aparente. Pocos sitios nuevos (greenfield) son desarrollados en áreas con conflictos aparentes, debido a los riesgos asociados. Los conflictos pueden surgir en todas las etapas del ciclo de vida de los activos, especialmente cuando hay cambios significativos y aumentos y reducciones en las actividades del sitio, o a raíz de un contexto externo volátil o que cambia rápidamente. Por lo tanto, se debe revisar el potencial para conflictos durante todo el ciclo de vida del activo, y se deben desarrollar medidas para evitar y gestionar los conflictos, según sea necesario.